Alexandra Salgado es una joven nicaragüense exiliada en Costa Rica, que se define como una persona queer, bisexual no binaria, activista feminista estudiantil, es ex atrincherada de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua(UNAN) Managua.
Salgado es una persona que siempre esa luchando por la defensa de los derechos humanos, con su ciberactivismo es desde antes del 2018, en Costa Rica se le ha visto en marchas alzando su voz en defensa de los derechos de las mujeres, exigiendo la liberación de personas presas políticas.
Su activismo viene desde antes del 2018 participaba en diferentes espacios “en el 2017 me descubrí como feminista“, recuerda, desde entonces ha estado en la calle acompañando a los diferentes movimientos y colectivas feministas demandando y exigiendo derechos, en Costa Rica se ha unido a espacios para fortalecer sus conocimientos y liderazgo para ser reconocida y respetada como una persona disidente.
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Alexandra cursaba la carrera de antropología social en la UNAN Managua debido a su participación a los acontecimientos de abril 2018 fue expulsada de la carrera “yo participaba de los eventos que promovía la universidad con diferentes embajadas” , lo que demuestra que era una joven activa, enamorada de la carrera que estaba estudiando y que su sueño era culminarla en su país de origen, pero el régimen al igual que a muchos jóvenes a Alexandra, también le arrebato su sueño.
Una de las características de esta joven es que cada día le gusta conocer cosas nuevas, “una de las cosas que mas me gustan es aprender sobre las diversas culturas por eso participaba de diferentes actividades para empaparme de las culturas de los países y comenzaba a descubrirme como joven” narra a Intertextual, las ganas de continuar aprendiendo es algo que ha venido poniendo en práctica desde su país.
Alexandra Salgado y su proceso de exilio
El 30 de octubre del 2021 tomo la decisión de exiliarse “lo que me obligo a exiliarme fue que comenzó la cacería de personas a lo cual se le llamo la noche de los cuchillos” y por temor a ser encarcelada tuvo que salir del país, valora que ha realizado activismo con personas de liderazgos bastante fuertes y visibles también la han ayudado a fortalecer su red de apoyo desde el exilio.
Otro factor importante que la llevo a exiliarse fue el conocer que la habían expulsado de la carrera que cursaba “me eliminaron del registro académico de la UNAN Managua, el saber que ya no podía estudiar dada las condiciones económicas en las que estaba mi familia decidí venirme acá y encontrar una oportunidad” su resistencia y resiliencia la han llevado a no rendirse ante las adversidades y continuar luchando cada día.
Importancia de la red de apoyo en su vida
Su proceso de exilio valora que ha sido bastante amigable ya que se rodeado de personas a su alrededor que la han apoyado “tengo una red de apoyo enorme que la he ido formando desde hace muchísimo tiempo, entonces el exiliarme no fue tan decil para mi” el no venirse sola y recibir el apoyo de su red la fortaleció para emprender este nuevo camino de la mano de personas que no la dejaron sola.
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Valora que ha sido importante encontrarse con personas que la sostienen y que la apoyan en cada momento que ha habido episodios difíciles sí, pero no ha estado sola “he sabido buscar apoyo y fortalecer mi red, aunque existen personas que no la tienen yo he tenido grandes oportunidades” asegura que todo esto le ha facilitado la inserción a esta sociedad costarricense, de la cual ahora ella forma parte.
Logros a pesar de su exilio
Aunque el régimen le quito la oportunidad de continuar su carrera universitaria en Nicaragua desde el exilio lucho para continuar su sueño poder aplicar a una carrera en una universidad pública costarricense y quedarse es algo complicado para muchos jóvenes.
“Para mi uno de mis mejores logros es haber aprobado el examen en dos universidades de Costa Rica” esto también la compromete a ser mejor persona cada día y demostrarles a los demás que si se puede.
“Casi ninguna de las mujeres de mi familia pudo estudiar porque no tenían las capacidades económicas para hacerlo y la forma que se vivía en esos tiempos” lamenta Alexandra, todo esto ha sido una motivación para que ella pueda luchar por sueños y aprovechar cada oportunidad que se le presente y que sea un escalón para poder culminar su carrera profesional.
Sueños y anhelos por los que cada día lucha
“Uno de mis mayores sueños y anhelos es poder culminar mi carrera y en un futuro poder optar a una maestría o un posgrado, seguir trabajando por Nicaragua por la construcción de la paz” además agrega, que su sueño es continuar luchando por la defensa de los derechos humanos y participar de los diferentes espacios donde le permitan poner en práctica su liderazgo y activismo que es lo que la mantiene firme en todo este proceso.
Otro de sus mayores sueños es poder volver a ver a mi familia “tengo 6 años de no ver a mi mama y casi 3 años de no ver a mis hermanas y hermanos, estos son mis sueños desde lo mas intimo hasta lo más colectivo” expresa Alexandra, así mismo asegura que continuara luchando por sus sueños “por más difícil que sean no es imposible alcanzarlos, cuando se desean con el alma”.
Mensaje a las juventudes
“Primero tratemos de ser coherentes con lo que sentimos, con lo que decimos y lo que pensamos el llegar a un acuerdo con esas 3 cosas nos ayudan a formar nuestra personalidad, debemos tenernos paciencia, no compararnos y así poder descubrir quienes somos, sin apresurarnos, porque puede ser un proceso bastante difícil” también insiste que, como jóvenes es importante poder crear redes de apoyo para enfrentar las circunstancias que se les presenten.
Sin duda alguna Alexandra Salgado, es una joven que a su corta edad ha demostrado que si se pueden lograr los sueños a pesar de las adversidades y aunque a ella se los quisieron arrebatar no lo han logrado, porque su resistencia y resiliencia va más allá de las fronteras “agradezco a todas personas que han estado a mi lado apoyándome y nunca me han soltado” finaliza.
