Un evento dedicado a los católicos LGBTQ+ se celebrará durante el Jubileo de 2025 en Roma, aunque las asociaciones critican que no ha sido incluido en el calendario oficial.
Se trata de una peregrinación del grupo italiano ‘La Tenda di Gionata’ (La Tienda de Jonathan), prevista para el 5 y 6 septiembre próximo, y es uno de los cientos de eventos planificados con motivo de Año Santo, que se espera que atraiga a unos 32 millones de fieles a Roma el próximo año.
Se tratará de «un momento especial de espiritualidad en la histórica iglesia barroca del Gesù que acogerá a los peregrinos LGBTQ+, a sus padres y a todas las asociaciones de este colectivo», adelantó el diario ‘Il Messaggero’ y continuará el sábado siguiente con un acto en la basílica de San Pedro con la participación de la asociación ‘La tenda di Gionata’ que desde hace años se compromete a acompañar a las personas LGBT+ en su camino de fe y otras organizaciones.
La peregrinación finalizará nuevamente en la Iglesia del Gesù, donde está enterrado San Ignacio de Loyola, fundador de los jesuitas.
El pro-prefecto del dicasterio para la Evangelización y responsable de la organización del Jubileo, Rino Fisichella, confirmó a la agencia ANSA el acto diciendo que «todos son bienvenidos» y explicó que esta iniciativa nació a instancias de la asociación y está en el calendario como muchas otras.
Sin embargo, las asociaciones del colectivo LGTBQ+ subrayaron que «no se trata de un Jubileo LGTBq+» porque, «de hecho, no hay rastro de este evento por el momento en el calendario del Año Santo».
El padre Pino Piva, uno de los jesuitas más activos en la acogida de católicos homosexuales, había hecho meses atrás una petición al Vaticano: «Escribimos una carta explicando por qué queríamos estar allí. Y después de muchos meses, respondieron positivamente, incluida nuestra petición de pasar por la Puerta Santa», se lee en el diario romano.
Pero en la página de internet gay.it piden que el papa Francisco intervenga en este caso sobre la acogida de los creyentes LGBTQ+.
«En las reuniones a puerta cerrada, Francisco demostró que tiene actitudes a veces misericordiosas y otras desagradables. Ha llegado el momento de que el propio papa elimine un tabú que todavía es fuerte en los círculos eclesiásticos», señala.