La cuarta temporada de Drag Race España llegó a su emotiva conclusión coronando a Le Coco como la nueva reina del concurso drag. En una final llena de talento, brillo y pasión, con Vampirashiano y Le Cocó destacó en el lip sync final, por su carisma, originalidad y presencia escénica, dejando una huella imborrable en la audiencia.
Sin embargo, más allá del triunfo de Le Coco, el momento más conmovedor de la noche fue el homenaje a las transformistas adultas mayores que sobrevivieron y resistieron durante la dictadura franquista. Este tributo celebró a aquellas artistas que, en una época de represión, desafiaron el régimen con su arte y valentía, manteniendo viva la llama del transformismo y la diversidad en condiciones sumamente adversas.
Les participantes de esta generación pionera subieron al escenario para recibir el reconocimiento que merecen, mostrando que el arte drag ha sido históricamente una forma de resistencia y libertad. Con lágrimas y aplausos, la audiencia y concursantes honraron su legado, reivindicando una lucha que, décadas después, sigue inspirando a nuevas generaciones.
Le Coco, consciente de la historia que sostiene el arte drag, dedicó su victoria a todas las transformistas que abrieron camino y a quienes continúan defendiendo los derechos de la comunidad LGBTIQA+ en España y el mundo.
Este final de temporada no solo coronó a una reina, sino que recordó a todos que el drag es más que un espectáculo: es memoria, resistencia y arte transformador.
Le Cocó se llevó un cetro, una corona y 30 mil euros, que eran parte del premio del concurso de la franquicia en España, agradeció y dedicó el premio a sus compañeras del concurso, a su mamá y abuelita diciendo, «gracias por salvarme la vida las amo esto es por ustedes».