Un ejemplo de superación, tras haber vivido experiencias duras en su vida, este joven ahora se dedica a escribir libros con enseñanzas bíblicas. 
Por: Intertextual/ Voces en Libertad/ contacto@intertextualcr.com
Como un apasionado de la fe cristiana y amante por la enseñanza bíblica, así se define el joven Enmanuel Rodríguez, de 33 años de edad, quien durante su corta trayectoria de vida ha experimentado el abandono de sus padres biológicos y ahora vive el anhelo de convertir “almas para Cristo” a través de sus libros religiosos que escribe como un aprendizaje de la Biblia.
“Si me preguntan cómo me defino les digo ‘soy un pecador perdonado’”, así se refiere Enmanuel, cuando es cuestionado sobre su vida luego de afirmar que encontró el amor de hermanos y familia entre los miembros de una iglesia cristiana, en el departamento de Carazo.
Enmanuel es un reconocido predicador evangélico y escritor de libros. Hace aproximadamente un año atrás, lanzó el primer tiraje de su libro que tituló “7 formas de ser tan humilde como yo”, el cual logró terminar de escribir en 2022 en medio de la pandemia del coronavirus. Actualmente, anuncia la impresión de otros 500 libros que continuará vendiendo de forma simbólica a $10.
“El título es un sarcasmo, un mal chiste. Hay un cantante cristiano costarricense, se llama Danilo Montero, él una vez estaba hablando sobre el orgullo y dijo ‘algunos de ustedes son tan orgullosos que se creen humildes y ese es el peor de los orgullosos’. El libro no se trata de la humildad, sino del orgullo y la idea de cada capítulo es como un sarcasmo”, asegura este joven escritor.
Misionero
Enmanuel se describe como un predicador cristiano, profesor de teología y enviado a servir. En los últimos años ha misionado con las Asambleas de Dios en Nicaragua y cursa su último año de la carrera de teología, en línea, en la Academia de Ginebra. Además, aspira a continuar escribiendo más libros y anunció que en octubre próximo lanzará su segunda obra.
“Ahora estoy terminando el segundo libro que se llama ‘Sastre de desastres’, para octubre si Dios lo permite, sin embargo, también ya ideé el tercer libro, y tengo una lista de los que quiero escribir”, destaca con entusiasmo.
Aprendió la pasión por leer y se motivó a predicar
Enmanuel narra que sus aspiraciones por escribir y el sueño de predicar se remontan a su niñez cuando sus padres biológicos, quienes no podían cuidar de él en ese entonces, prefirieron dejarlo a su suerte en un orfanato del departamento de Estelí, de donde es originario.
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Dentro de la casa hogar, conoció al predicador católico Salvador Gómez, quien con su carisma lo motivó a crecer en la prédica, aunque años después él prefirió estudiar otra enseñanza teológica alejada al cristianismo católico.
Recuerda que fue un matrimonio oriundo de León que se dedicaba al comercio en Estelí, que lo adoptó cuando lo conocieron en el orfanato y se lo llevaron a vivir a Carazo, donde actualmente reside con su padre adoptivo Manuel Rodríguez Mairena, luego del fallecimiento por problemas de salud de Nelly Aragón, a quien por muchos años llamó madre.
Describe que desde su niñez salía a las calles a vender diferentes postres junto a su madre adoptiva, quien además le enseñó el buen hábito de la lectura. En ese tiempo, visitó una iglesia evangélica para asistir a las clases dominicales de los niños, aunque siempre prefirió estudiar la biblia con los adultos.
Recuerda que muchos de sus logros en clases se relacionaban a su excelente escritura, incluso, en 2004 ganó el concurso de redacción a nivel nacional. También asegura que cuando empezó a predicar, escribía enseñanzas en un blog personal.
Su primera vez en el púlpito fue un Viernes Santo, cuando la iglesia buscaba a un predicador para el “culto de las siete palabras” y Enmanuel fue elegido por el pastor para dirigir la enseñanza del día. “Era un culto especial, yo le dije (al pastor) que lo haría y me lo permitió. Así empecé. De hecho mi mamá no solía ir a la iglesia pero la invité, y ella pensó que me daría pánico escénico, pero no”, manifiesta.
Un pastor lo rechazó y menospreció sus escritos
Para lograr su anhelo de escribir libros y alzarse como un reconocido predicador cristiano, Enmanuel también se enfrentó al menosprecio y los malos tratos de otros altos religiosos de su congregación. Asegura que un pastor evangélico fue quien le ayudó a encaminarse en el mundo de la prédica, pues en reiteradas ocasiones visitaron varias iglesias.
Sin embargo, la alegría y el apoyo del reverendo le duró muy poco, pues éste reaccionó agresivo e hiriente cuando Enmanuel le habló sobre su proyecto de escribir y publicar un libro, el cual se trataba de un estudio religioso desde la perspectiva de la teología y de las enseñanzas bíblicas que predica.
«Eso es una falta de respeto, es la idea más estúpida que yo he escuchado, vos sos un gallito que se cree teólogo, etc, me dijo y me mató, porque cuando estas palabras salen de alguien que vos admiras, tiene mayor peso. Me alejé de él. La verdad es que solo creen en tus proyectos hasta que lo lográs, en el proceso sos un loco”, afirma.
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A pesar de las críticas y el desánimo de otros, Enmanuel no se rindió y logró publicar su primer libro con ayuda de muchas amistades y hermanos de su iglesia, a pesar del alto costo de las editoriales en Nicaragua. “Ahora hay que seguir”, dijo.
