Por: Redacción Intertextual contacto@intertextualcr.com
Monseñor Rolando Álvarez Lagos, Obispo de la Diócesis de Matagalpa y actual preso político de la dictadura de Daniel Ortega, fue galardonado junto a Vilma Núñez de Escorcia, defensora de derechos humanos y presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
En el año 2018, la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo ilegalizaron al Cenidh, como una pasada de cuentas por defender los derechos de los presos políticos que en el año 2018 fueron apresados por participar en las protestas cívicas antigubernamentales.
Tanto Monseñor Rolando como doña Vilma Núñez fueron galardonados por el Parlamento Europeo (PE) por estar entre los tres finalistas del Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia 2023.
La ceremonia de premiación se realizó este 12 de diciembre en Estrasburgo, en Francia. Monseñor Rolando Álvarez y Vilma Núñez fueron representados por el sacerdote Uriel Vallejos y Sara Henríquez, defensora de derechos humanos en el exilio.
Indice
ToggleEurodiputados portan camisetas de Monseñor Rolando Álvarez y Vilma Núñez
Los nicaragüenses en el exilio que fueron acompañados Jimena Reyes, directora de la Oficina de las Américas de la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH), portaron una camiseta con los rostros de Monseñor Álvarez y Vilma Núñez.
En la camiseta se aprecia a Monseñor Rolando vistiendo ropa azul, vestimenta con la que el régimen mostró al purpurado en marzo de este año cuando recibió una visita familiar en el Sistema Penitenciario Nacional, ubicado en el municipio de Tipitapa.
La justicia sandinista, en febrero de este año, condenó Monseñor Rolando Álvarez a 26 años y cuatro meses de prisión por negarse a ser desterrado a Washington junto a 222 presos políticos, a quienes los diputados sandinistas despojaron de la nacionalidad mediante una reforma exprés a la Constitución Política de Nicaragua.
El purpurado fue acusado por los supuestos delitos de “propagación de noticias falsas” y “traición a la Patria”.
Premio lo gana Masha Amini
El primer lugar le fue otorgado a Jina Masha Amini y el Movimiento Mujeres, Vida y Libertad, de Irán. El premio lo recibieron familiares de la joven, iraní de origen kurdo que fue arrestada y torturada por la policía religiosa islámica por no usar su hiyab correctamente.
Jina Masha Amini, de 23 años de edad, murió el 16 de septiembre de 2022, en un hospital de Irán, después de permanecer en coma, producto de la golpiza que recibió de parte de la policía religiosa de Irán.