Karola Santamaría, llegó a Costa Rica en calidad de solicitante de refugio hace cinco año. Ella es una persona resiliente, que puso su empeño por seguir estudiando la carrera que no pudo culminar en la UNAN de León.
Por: Redacción Intertextual/editaint24@proton.me
Obligada a abandonar su país debido a la realidad de atraviesa Nicaragua desde el 2018, María Karola Santamaría llegó a Costa Rica en calidad de solicitante de refugio hace cinco años, en donde se enfrentó a la realidad de la migración y los dolores del exilio forzado; sin embargo, esto no detuvo sus sueños de profesionalizarse en su área de interés.
Karola Santamaría era estudiante universitaria de la UNAN- León, apasionada por la odontología, carrera la cual no logró culminar debido a su desplazamiento forzado, decidió aprovechar las posibilidades del apoyo familiar para continuar con sus estudios profesionales en el vecino país del sur, un segundo comienzo al cual describe como “difícil”.
“Decidí iniciar en la Universidad Latina pero la universidad no me daba una respuesta mucho más acertada de la que yo quería para convalidación de mis materias” comentó Santamaría, quien logró recuperar sus notas en la UNAN León y así buscar una casa de estudios que le reconociera al menos el 40 por ciento de sus notas, a como lo demanda el país.
Las puertas de la reintegración estudiantil en Costa rica se abrieron para la joven nicaragüense en la Universidad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología (ULACIT) en donde le lograron reconocer las materias cursadas en Nicaragua; sin embargo, la pandemia del COVID-19 tuvo grandes afectaciones en el camino a culminar su profesionalización, extendiendo de dos a cuatro años sus estudios.
Para lograr su sueño de certificarse en esta área de la salud, habían factores los cuales representan para la joven refugiada un “privilegio” como el apoyo económico de sus familiares, a pesar de eso, hubo momentos en donde la familia ya no podía seguir apoyándola, lo que significaba para la joven la necesidad de regresar a su país, aun teniendo en cuenta el “peligro” que enfrentaría al momento de cruzar la frontera.
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María Karola Santamaría, habla sobre su experiencia y da un mensaje importante
En enero de 2023 Karola culminó sus estudios con éxito en Costa Rica, si bien había cumplido su sueño, no fue hasta octubre que logró colegiarse y obtener su permiso para ejercer como odontóloga, lo que califica “un proceso muy largo”.
El querer es poder una frase resiliente de María
Esta experiencia de vida y superación para la joven representa la realidad de que cuando se quiere las cosas y se proponen, se pueden cumplir, siempre y cuando se tengan las ganas y la iniciativa puesta en los objetivos.
“Yo en algún momento incluso quise abandonar la carrera, porque toda carrera yo creo que tiene dificultad en algún momento, pero nunca se deja de aprender” comentó la joven.
Agrego que durante el proceso las personas se van a dar cuenta de que “muchas cosas valen la pena y que todo pasa por algo.”
Dentro de sus planes a futuros la joven se encuentra en una etapa de descubrimiento para su especialización dentro de la odontología, y mientras decide ese camino su trabajo sigue su curso brindando atenciones integrales.