Por: Redacción Intertextual/ contacto@intertextualcr.com
La capitalina Hazzel Johana Mejía Traña, de 36 años, salió la noche del 4 de junio a trabajar con la esperanza de llevar el sustento a su hogar, sin imaginarse que esa sería la última vez que vería a sus seres queridos.
Esa noche desapareció al llegar al sector de la Subasta, Managua y tres días después fue encontrada semienterrada en un cauce de Sabana Grande, del Distrito Seis de la capital de Nicaragua, con evidencias de haber sido asesinada con saña.
Intertextual constató que el caso de Mejía y el de otras 18 mujeres asesinadas en el país a lo largo del 2023, aún continúa en la impunidad, sin incluir tres casos que la Policía tipificó como suicidios, pero que el Observatorio Católicas por el Derecho a Decidir (CDD), las incluyó en la lista de víctimas de femicidios, tras concluir que se trató de asesinatos.
Hasta este 29 de diciembre Católicas por el Derecho a Decidir, contabiliza 74 asesinatos contra mujeres, En el extranjero han asesinado a 22 y en Nicaragua 52 según el observatorio, por lo que el año culminará con al menos el 19 por ciento de los casos en la impunidad.
De los 19 casos que se encuentran en la impunidad, nueve han ocurrido en la Costa Caribe Norte del país y cinco en la Costa Caribe Sur, que son las zonas con el mayor número de muertes violentas de mujeres.
En algunos casos, la policía ha logrado dar con la identidad de los presuntos autores, pero no con el paradero de ellos, tal es el caso de José Luis Urbina, de 30 años, quien huyó el 18 de abril, luego de matar a golpes a su cónyuge Yelba del Carnen Zamorán en el municipio de Muelle de los Bueyes de la Costa Caribe Sur.
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ToggleAracely Varela Bonilla en Rivas
Otros casos como el de la anestesióloga de León, Aracely Varela Bonilla de 51 años, han quedado envueltos en un completo misterio y con más interrogantes que respuestas, caso aún sin resolverse, que ha dejado a la familia Varela y al departamento de Rivas.
Los restos de la anestesióloga, fueron localizados el 20 de marzo, en un predio montoso de la ciudad turística de San Juan del Sur, 32 días después de haber sido reportada como desaparecida, pero hasta hoy la Policía nunca dio a conocer quien o quienes le arrebataron la vida y mucho menos hay un proceso judicial.
Estado responsable
Para la activista transfeminista La Damaso Vargas, es difícil hablar de femicidios en Nicaragua sin un Estado responsable de la protección de las mujeres, mas aun cuando colectivos y mujeres defensoras están siendo perseguidas en el país, «la capacidad de las activistas de acompañar a estas mujeres se esta viendo totalmente coartada y eso es doloroso para nosotros que sabemos que las familias necesitan acompañamiento», sostiene Vargas.
Varga dice sentirse alarmada por las que están sucediendo con las mujeres en Nicaragua, apuntando a la poca intervención del Estado de Nicaragua en la protección a las fémina del país.