(EFE).- El Gobierno de Nicaragua pidió este martes a la Unión Europea (UE) no intervenir en sus asuntos internos, luego de que el organismo comunitario criticara el cierre masivo de organismos de la sociedad civil en el país centroamericano y demandara el cese de la represión y la restauración de las libertades.
«Basta de injerencia, de falsedades, falsificaciones y abusos en nombre de una supuesta y teatralizada ‘democracia’ que bañó de sangre, miseria, sudor y lágrimas los territorios donde se asentaron para matar, exterminar y atracar», señaló en un comunicado el Ejecutivo nicaragüense, que preside Daniel Ortega.
En el pronunciamiento, titulado ‘¡Basta ya de injerencia!’, el Gobierno sandinista «aclaró a los señores de la Unión Europea que Nicaragua es un país y una patria, bendecida, libre, soberana, y por lo tanto, no es colonia, ni recibe ni acata órdenes de ningún país del mundo».
Destacó que las decisiones de las autoridades nicaragüenses se toman en base a la Constitución de la República y a las leyes que, «como país y pueblo independiente, rigen nuestro funcionamiento institucional soberano».
«Recordamos a los señores de la Unión Europea que la historia sobre la que están basados sus países es de atrocidades y crímenes de lesa humanidad, cometidos en el afán voraz de someter a los pueblos, para arrebatar riquezas, patrimonios naturales, culturales y la inteligencia suprema de los continentes del mundo», continuó.
Indice
ToggleLea: Gustavo Petro responde a acusación de Daniel Ortega: “al menos no arrastro los DD.HH. del pueblo”
Managua dijo que «basta una visita a los museos europeos para constatar cómo se enorgullecen del salvajismo, la barbarie, la inmoralidad con la que “conquistaron” países y pueblos a quienes arrebataron todo, a cambio de nada».
Nicaragua acusa a la UE de cometer genocidio en Gaza
El Gobierno nicaragüense también acusó a la UE de cometer un «genocidio» en la Franja de Gaza: «El genocidio que cometen cotidianamente en Gaza es apenas un pálido reflejo de las cruzadas y conquistas sanguinarias de los imperios, los colonizadores y los neocolonialistas que todavía, atrevidamente, pretenden dictar normas al mundo que no solo les desconoce, sino que les condena», agregó.
El Ejecutivo que preside Ortega con su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, pidió por tanto a la UE cumplir «con el respeto a los modelos y formas de vida de pueblos valientes, libres, que rechazamos contundentemente la hipocresía en sus voces injerencistas, y les sentenciamos todos los días por su repudiable historia de ignominias».
«A nosotros nos preocupa que las legítimas demandas de nuestros pueblos no han sido escuchadas, mucho menos cumplidas, por esos farsantes países que, osada, desvergonzada, y arrogantemente se creen amos, cuando sólo representan la peor y más sacrílega especie humana», concluyó el Gobierno sandinista.
Lea: Organizaciones se solidarizan con el despido masivo de empleados públicos ejecutado por el régimen Ortega Murillo en Nicaragua
La UE expresó este martes su «preocupación significativa» por el cierre de más de 1.500 organizaciones no gubernamentales (ONG) la pasada semana, con lo que suman más de 5.400 desde abril de 2018.
En un comunicado, el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, demandó al Gobierno de Ortega el cese de inmediato de «estas acciones represivas», así como la necesidad urgente de restaurar las libertades fundamentales en Nicaragua.
Además, la UE instó a las autoridades nicaragüenses a iniciar un diálogo «auténtico e inclusivo» con todos los sectores de la sociedad para superar la crisis que vive Nicaragua.
Nicaragua vive una crisis política y social desde abril de 2018, que se ha acentuado tras las controvertidas elecciones de noviembre de 2021 en las que Ortega, en el poder desde 2007, fue reelegido para un quinto mandato y cuarto consecutivo, con sus principales contendientes en prisión.