“La preocupación que hay en el sector del tabaco es que estos grupos, gocen de privilegios que da Daniel Ortega que afecten la sana competencia."dice empresario local.
Los empresarios cubanos y norteamericanos de la industria del tabaco que desde hace 15, 20 y hasta 40 años, se asentaron en la ciudad de Estelí tienen ahora “nuevos e incómodos inversores” de la mano de Daniel Ortega han llegado comprando fincas y remodelan instalaciones para competir en el sector de tabacaleras y pureras.
Esto no tendría nada de malo, de no ser porque los empresarios ven que los nuevos inversionistas llegan «acuerpado» del régimen de Daniel Ortega y pueden operar con ventajas que ellos no han tenido y que tampoco tendrán.
Los empresarios que por obvias razones han pedido hablar de este tema bajo resguardo de su identidad, creen que algunos de estos nuevos empresarios, son prestanombres de origen cubano recién llegados de la isla.
Lea: Familias miskitas emigran a Estelí para trabajar en tabacaleras
“Tras 30 o 40 años en este mercado, todos nos conocemos, ningún inversionista de estos nuevos es alguien de nombre, si acaso son trabajadores en tabacaleras de Cuba, son gente que solo prestan el nombre, hay capital del país ahí, gente de este gobierno”, asegura el tabacalero que señaló que se han establecido en fincas aparentemente ligada a gente del régimen nicaragüense.
Aseguró que entre los nuevos inversionistas hay funcionarios de la empresa estatal cubana, Cubatabaco, que es la compañía del Estado cubano que controla todo lo relacionado a la producción y comercialización del tabaco en la isla.
Indice
ToggleInversionistas cubanos: ¿De dónde los sacó Daniel Ortega?
A los nuevos inversionistas se les ha visto en fincas como una que está cerca de la cuesta La Kukamonga, a unos 19 kilómetros al norte de la ciudad de Estelí, en otra que se dedicaba al rubro y que perteneció a personas de origen guatemalteco que supuestamente estaban vinculadas al crimen organizado y que tras un operativo policial, quedó en manos del Estado.
Esta finca se ubica en las cercanías de lo que una vez fue la Escuela de Agricultura y Ganadería de Estelí, conocida también como Universidad Católica del Trópico Seco de Estelí, (Ucatse), y que el gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo, confiscaron este año en medio de la guerra que tiene contra la iglesia Católica de Nicaragua.
Pero a los nuevos inversionistas se la ha visto también en fincas de privados que vendieron a los poderosos adquirentes. Algunos comunitarios comentaron para este reporte, que oyeron decir que no solo buscaban hacer rendir su inversión, sino ayudar a mejorar las vidas de los comunitarios.
Martín es un comunitario que ha trabajado casi toda su vida para varias fincas de tabaco en esta zona. Contó que en varias fincas que antes estaban en desuso por diferentes razones, incluyendo las políticas, han empezado a buscar jornaleros para reactivarlas. “A algunos vecinos les han preguntado qué necesidades tiene la comunidad”, confió.
“Esta propiedad era de una gente que fue procesada por supuestos nexos con el crimen organizado e intervenida por el Estado, después que fueran encontrados culpables y condenados a varios años de cárcel, ahora aparecen unas personas, supuestos empresarios cubanos, invirtiendo en ellas”, confirmó otro campesino sobre la propiedad que alguna vez fue de los guatemaltecos.
El comunitario relató que en la propiedad, además de trabajos para el cultivo de la hoja, construyeron plantas de más de dos pisos para el proceso y la elaboración de puro. “En Cuba no hay empresas privadas, ¿De dónde salieron inversionistas tabacaleros cubanos?”, se preguntó un empresario local al comentar el tema para este reporte.
Temor a competencias desleales
Otras fincas en manos de los nuevos tabacaleros es la que está ubicada a orillas de la Carretera Panamericana, muy cerca a la Quinta “El Pedregal” y a pocos kilómetros de la ciudad de Estelí. En total, según comunitarios del lugar, serían al menos nueve fincas en manos ahora de los nuevos tabacaleros.
Sobre esta propiedad, un trabajador contó que sus dueños renunciaron a cultivar hojas de tabaco debido a que los suelos estaban dañados por material volcánico. “Se extrajo el material como piedrín que se usaba para asfalto y ahora los nuevos dueños la limpian para rehabilitar la finca”, dijo un campesino del lugar.
También puede leer: Colonos asesinan a dos guardabosques indígenas en menos de una semana
Los empresarios tradicionales señalan que en los últimos diez años, el puro nicaragüense ha tenido una buena demanda en mercados europeos, asiáticos y de Estados Unidos y Canadá. “Eso explica estos movimientos”, dice un pequeño tabacalero, quien llegó a llamar “grandes complejos y modernas fábricas” las remodelaciones que hacen los nuevos inversionistas del tabaco en este municipio.
“La preocupación que hay en el sector es que estos grupos, gocen de privilegios que afecten la sana competencia. Causaría molestia la competencia desleal”, se quejaron. “Sabemos que en la isla (Cuba) existen graves problemas para sostener a este sector debido a las constantes fallas en la energía y los altos costos de producción por el bloqueo que sufre el país”, señaló un empresario con 22 años en el sector.
Miedo a confiscaciones
Los empresarios dijeron también que padecen un temor fundado en las confiscaciones que podrían venir acompañando esa inversiones, como una forma de garantizar un monopolio de la industria para cierto sector protegido por la dictadura de Daniel Ortega .
Las confiscaciones ejecutadas por el régimen Ortega-Murillo han cimentado esa desconfianza. Desde el 2018 por ejemplo, ha anulado a 3.500 oenegés y se ha quedado con todos sus bienes. Solo en la toma de los bienes del diario La Prensa, el Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (INCAE) y la Fundación del Río, lo robado ascendió a los 51.5 millones de dólares, según sus administradores.
One Response
[…] áreas de cultivo de tabaco, que antes fueron propiedad de la Universidad Católica Agropecuaria del Trópico Seco, UCATSE de […]