Las juventudes en El Salvador han venido trabajando en la organización y su empoderamiento y conociendo acerca de sus derechos y así poderlos demandar ante un Estado que no tiene la voluntad de empoderar a las y los jóvenes para prepararlos de cara aun relevo generacional, tomando en cuenta las capacidades y habilidades que posee la juventud en la actualidad.
Desde las universidades se ha visto trabajando para que las y los jóvenes se puedan organizarse esta iniciativa nace ante la necesidad de la falta de la defensa de los derechos especialmente en la Universidad Nacional del Salvador, siendo esta la única alma mater nacional del país, lo que significa que aglomera a una gran parte de la juventud salvadoreña y servido para denunciar las principales violaciones que sufren los y las estudiantes.
“Todas estas cosas que nos atañan a nosotros como mujeres universitarias y así poco a poco se ha ido extendiendo esta red a otras universidades del sector privado y lo que hacemos es defender derechos, defender a las que tienen miedo de hablar” explica Fabiola Meléndez, una joven activista, directora de la Red de Mujeres Universitarias del Salvador.
Es importante mencionar la valentía de la juventud ante un Estado que no está interesado en que las juventudes se empoderen acerca de sus derechos, aunque existen relaciones de poder dentro de las universidades se ha logrado sensibilizar a los jóvenes, ahora ya se realizan algunas denuncias de las cosas que pasan y que antes por temor, desconocimiento y falta de organización, no realizaban este tipo de denuncias.
“Nosotros queremos ser la voz de aquellas que aun tienen miedo de hablar” refiere Fabiola, en años anteriores no existía tanta dificultad para la juventud se organizara, en la actualidad existe una persecución en contra de las juventudes que deciden alzar su voz y organizarse para denunciar todas aquellas violaciones a los derechos humanos y la limitación de falta de oportunidades y participación de la juventud.
“Lo que hemos venido haciendo es dándole ese acuerpamiento a las compañeras de sexo genero disidentes y que muchas veces son violentadas y por temor no denuncian” dijo a Intertextual Joshi García, una joven activista y miembro activa de la de la Colectiva Feminista para el Desarrollo Local en El Salvador y que también trabaja en la defensa de los derechos de las mujeres y las juventudes salvadoreñas.
Este trabajo es arduo y muchas veces cansado, la esperanza es obtener frutos a futuro lo importante es que han venido poniendo en practica el acuerpamiento y la organización de las y los jóvenes que sueñan con un país donde pueda reinar la democracia y las oportunidades para los diferentes sectores de la población y donde la demanda de las juventudes sea escuchada y así puedan ocupar espacios, que en la actualidad no se les reconoce.
Uno de los grandes logros que han tenido la población joven de El Salvador es mantenerse organizados y lograr que otros jóvenes se organicen y conozcan acerca de sus derechos, aunque no ha sido una lucha fácil la juventud salvadoreña sueña con un país donde se puedan restituir los derechos de la población en general y así poder vivir en democracia y libertad que es lo que más anhelan los salvadoreños que no están de acuerdo con el régimen de excepción instaurado por el actual gobierno.