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Una lección de fortaleza y valentía, brindó a su corta edad el niño Luis Emilio Morales, de 4 años, al librar una dura batalla contra un cáncer de ojo que puso en riesgo su vida. 
Por: Redacción Intertextual/ contacto@intertextualcr.com
Este pequeño acorazado, de la comarca de Pica Pica del municipio de Potosí, en el departamento de Rivas, logró vencer a su peor enemigo, tras someterse a un largo y agotador tratamiento que incluyó 18 quimioterapias y una exitosa cirugía que le realizaron para extraerle el ojo derecho, donde se desarrollaba el cáncer, de tipo retinoblastoma, según explicó su mamá Luisa Emilia Morales Dominguez de 24 años
“Fue un momento difícil, pero la desición de extraerle el ojo era irreversible ya que el cáncer amenazaba con propagarse y arrebatarle la vida a mi niño”, relató Luisa Emilia. El menor comenzó a batallar contra el cáncer en plena fiestas de Navidad y Fin de Año del 2021.
Para esa fecha su mamá uisa Emilia, había notado que una extraña “mancha” había aparecido en el centro del ojo derecho de Luis Emilio, que en ese entonces tenía solamente 3 años de edad.
“Esa parte del ojo le brillaba y al llevarlo a pasar consulta al Centro Nacional Oftalmológico de Managua (Cenao), me le diagnosticaron el 24 de diciembre del 2021 que era un tipo de cáncer conocido como retinoblastoma”, comentó Morales.
A partir de esa fecha, el pequeño se enfrentó en el hospital infantil la Mascota de Managua, a tres ciclos de quimioterapias, con el objetivo de reducirle el tamaño del tumor que crecía en su ojo para posteriormente realizar la cirugía en el Cenao.
” Era un ciclo por mes y cada uno consistía en tres quimioterapias que se hacían en días consecutivos, comenzando a partir de diciembre, por lo que el procedimiento culminó en febrero” señaló.
En marzo del 2022, después de haber culminado con los tres ciclos de terapias, Luis Emilio, dio otro paso hacia la victoria, al someterse a la cirugía que le realizaron para extraerle su ojo.
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“Esa cirugía era la única opción para salvarlo y gracias a Dios todo salió bien” comentó Luisa, mientras acariciaba a su pequeño en la sala de su casa. Pero la batalla no había culminado, ya que entre los meses de abril y junio, Luis Emilio, tuvo que enfrentarse a otros tres ciclos de quimioterapias postquirúrgicos.
“El procedimiento de las terapias, fue igual a las que recibió antes de la operación y en esta ocasión el objetivo era eliminar cualquier raíz que pudiese haber quedado del cáncer” afirmó la mamá.
Tras completar el nuevo ciclo de terapias, los médicos constataron a través de exámenes especializados que el cáncer que hacía peligrar la vida del menor había sido extinguido de raíz.
“En medio de todo el sufrimiento, esa buena noticia la recibí en agosto del 2022 y posteriormente con apoyo de las personas mi hijo logró adquirir una prótesis que le ha permitido recuperar su confianza y llevar una vida feliz como cualquier niño” detalló.
El menor comenzó a utilizar su prótesis a partir del pasado mes de diciembre y según su mamá, tiene un costo de 1,300 dólares.
“Pero por ser un paciente del hospital “La Mascota”, nos hicieron una rebaja y al final la compramos en 800 dólares, con la ayuda de muchas personas que aportaron su granito de arena y las gestiones de la doctora de Rivas, Martha Julia Chamorro, que también promovió campañasa a favor de mi hijo”, explicó la madre.
Contó que los momentos más difíciles fueron las quimioterapias, ya que aseguró que el niño se volvió agresivo y también perdió el apetito. “Lo del ojo también lo afectó, pero rápidamente ha recobrado su alegría que le caracteriza y sobretodo ahora que cuenta con su prótesis, ya que hasta acude a sus clases de preescolar alegre”, manifestó.
Al final explicó que el cáncer de ojo que afectó al niño es de origen hereditario y que cada dos años tendrá que renovar la prótesis al niño.
