Falta de ordenamiento, aglomeración de vendedores y compradores, la falta de señales en la vía y la inexistencia de zonas peatonales en ese populoso centro de compras causaron otro accidente este fin de semana. Los alcaldes prometen ordenar y nunca cumplen.
Por: Intertextual/ Voces en Libertad/ contacto@intertextualcr.com
Por más de dos décadas, el mercado “Ernesto Fernández” de Masaya, se consolidó como uno de los centros de compras más importantes del país y el segundo más grande después del Mercado Oriental de Managua. A pesar de su crecimiento apresurado y desordenado, las autoridades municipales han hecho caso omiso a la urgencia de mejorar y ordenar a los comerciantes que ofrecen sus productos a orillas de la carretera y cerca del estacionamiento de buses.
Como consecuencia de ese olvido, este fin de semana, otra tragedia enlutó a otra familia luego de conocerse el deceso del ciudadano de 84 años de edad, Pedro José López Montoya, quien fue arrollado por las pasadas llantas de un autobús que cubre la ruta Las Crucitas-Niquinohomo, cuando éste, intentaba cruzar una de las calles del mercado a bordo de su bicicleta. La tragedia se debió al desorden del lugar, la aglomeración de vendedores y compradores, la falta de señales en la vía y la falta de zonas peatones en ese populoso centro de compras.
Testigos señalan que el conductor del pesado automotor, no detuvo su marcha ni cedió el paso a los transeúntes que constantemente circulan por las entradas principales y al interior de este mercado. La Policía aún investiga cómo ocurrieron los hechos, mientras Medicina Legal (IML), determina las causas exactas que provocaron el fallecimiento del ciudadano.
Urge un reordenamiento
Bajo anonimato, un exconcejal de la ciudad de Masaya explicó que este populoso centro de compras “refleja la sobrevivencia de miles de familia de diferentes municipios de Masaya, e incluso, de otros departamentos del país”, pues “la población -como dice el buen nicaragüense- se rebusca la vida al poner su negocio a parte de los grandes negociantes que tienen abarrotes y que abastecen a pequeños negocios”.
Por ello, manifiesta la importancia de que las autoridades municipales, reordenen este mercado, el cual ha crecido de forma descontrolada a la vista y paciencia de los alcaldes.
“Siempre tenemos la complacencia de las autoridades municipales quienes con el afán de recaudar más dinero, no han tenido el interés de iniciar un ordenamiento en el mercado, porque allí hay comerciantes que tiene tramos, sin embargo, prefieren ubicarse a las afueras del mercado y terminan obstaculizando el paso en la calle”, explica.
Toman impuestos pero no los reinvierten
Para el exfuncionario local de Masaya, la falta de ordenamiento en el mercado “Ernesto Fernández” es “un problema que la misma alcaldía debería de enfrentar con la intención de salvaguardar la seguridad de la población”, misma que a diario lo visita.
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“Es un problema complejo en el que tienen que ver las autoridades municipales y la misma Policía (…) se dijo que iban a ordenar y no hay intenciones; a la alcaldía lo que le interesa, es que las recaudaciones crezcan, eso mientras no existan mejoras que beneficien al mercado”, agregó.
Por otro lado, el exfuncionario señaló que es necesario que los transportistas reciban “cursos de relaciones humanas y sociales”, debido a la pésima atención de los conductores del transporte público con los pasajeros. A su criterio, la situación del mercado de Masaya “es una bomba de tiempo” que podría acabar en más tragedias, si las autoridades no asumen su responsabilidad.