“8 de cada 10 personas de la población laboral nicaragüense no disfruta propiamente del derecho al trabajo,” revela el Informe. 
Por: Redacción Intertextual/ contacto@intertextualcr.com
Este marte 6 de junio se presentó en San José, Costa Rica, el primer informe sobre derechos económicos y sociales en Nicaragua, trabajado desde la sociedad civil, bajo la coordinación del economista y politólogo Enrique Sáenz, miembro de La Fundación Puentes para el Desarrollo, quienes trabajaron durante seis meses, así lo anunció Edipcia Dubón; directora de dicha organización.
Dentro de la metodología utilizada para la elaboración de este primer informe está un análisis de datos y estadísticas oficiales: Gubernamentales y de organizaciones internacionales, se destacó en la presentación.
El informe, que está accesible en la página web de Puentes para el desarrollo, revela que en las últimas décadas el 80% de la población nicaragüense, apta para trabajar, se encuentra en el sector laboral informal, tomando en cuenta los datos oficiales de Instituto Nicaragüense de Seguridad Social que puntean la tasa de trabajo informal en un 78%. Por tanto, “8 de cada 10 personas de la población laboral nicaragüense no disfruta propiamente del derecho al trabajo,” revela el documento.
Puede descargar aquí la presentación del informe:
“La propaganda oficial escribe que tenemos en Nicaragua un nivel escandinavo en materia de desempleo, dicen que el desempleo en Nicaragua es el tres por ciento, pero se oculta que lo fundamental en el caso de Nicaragua es el subempleo” dijo Sáenz en su presentación, definiendo al subempleo como el trabajo que no presta todas las prestaciones según la ley, como es el salario mínimo.
Para diciembre de 2022 los datos El Instituto Nacional de Información de Desarrollo (INIDE) revelan un 55 por ciento de subocupación laboral en el país, con un 3% de desempleo abierto, 38% de subempleo y un 15% de trabajo no remunerado.
En el caso del costo de la dieta básica en el país se mostró un aumento del 22% en el precio de los productos de alimentación en los que resaltan los frijoles con un 66% y las tortillas con un 33%, siendo estos dos uno de los principales productos en la mesa del nicaragüense.
Con respecto al salario en Nicaragua, se mostró un ajuste del 10% en el caso del salario mínimo, siendo este el más alto con tan solo 10% y el más bajo es del 1%, correspondiente al salario promedio de la economía formal.
Estos aumentos no logran alcanzar el costo actual de la canasta básica, que ronda los 18,000 córdobas de los cuales, 13,542 córdobas corresponden a los alimentos.
“Las cifras anteriores evidencian que en realidad lo que está planteado no es propiamente el derecho al trabajo o a un salario digno…es el derecho a la sobrevivencia” se lee en la presentación.
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Temas como Educación, Salud, cifras de COVID-19 y seguridad social también fueron abordados en la presentación del informe, con datos relevantes adjuntos en la página web de Puentes.
“Los Derechos Económicos y Sociales también son Derechos Humanos y en Nicaragua se violan masivamente y de manera cotidiana” dijo Sáenz al finalizar su presentación.
