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“Persecución contra religiosos preocupa”, dice el opositor en el exilio. 
Por: Redacción Intertextual/ Voces en Libertad/ contacto@intertextualcr.com
La policía del régimen de Daniel Ortega confirmó hace unos minutos la detención de un tercer sacerdote en menos de una semana. Según una nota de prensa emitida esta mañana, el religioso, identificado como Iván Montesinos, párroco de la iglesia San Juan Pablo II, ubicada en la villa Chagüitillo, el municipio de Sébaco, Matagalpa, fue detenido por el supuesto delito de traición a la patria.
El dirigente de la opositora Fuerza Democrática Nicaragüense (FDN), Luis Fley, señaló que con los últimos encarcelamientos arbitrarios de tres sacerdotes de las diócesis de Estelí y Matagalpa, la dictadura intenta desaparecer a la Iglesia Católica en Nicaragua.
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Tanto la Diócesis de Estelí y Matagalpa, ambas son pastoreadas por Monseñor Rolando Álvarez, quien este jueves cumple 102 días desaparecido, después que el régimen lo mostró durante una visita familiar en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, donde se encuentra recluido.
“Delito ser sacerdote”
Monseñor Rolando Álvarez Lagos, obispo de la Diócesis de Matagalpa y Administrador Apostólico de la Diócesis de Estelí, fue condenado por la justicia sandinista el pasado 9 de febrero a 26 años y cuatro meses de prisión, después que se negara a abordar un avión para ser desterrado a Estados Unidos por la dictadura Ortega Murillo.
“La detención de tres sacerdotes en los últimos días es una muestra más del afán de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo de silenciar a la Iglesia Católica, comenzando con sus pastores”, dijo Luis Fley al ser consultado para este reporte. “Ya pareciera delito ser sacerdote en Nicaragua”, denunció.
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“Ya no queda duda de que hay una persecución religiosa en Nicaragua y principalmente está dirigida contra los sacerdotes”, expuso Fley, quien reitera preocupación por los encarcelamientos de los religiosos.
“Esta situación se agrava cada día”, advierte el dirigente opositor, quien en conjunto con otras organizaciones cívicas ha condenado el arresto de los ciudadanos religiosos y laicos. Fley señala que no hay justificación legal que sustente la detención de los curas, quienes son perseguidos por el régimen.
Ataques de vieja data
El dirigente de la FDN, destaca que los ataques de la dictadura de Daniel Ortega en contra de los sacerdotes no son nuevos y recordó que en los años de 1980, cuando Ortega estuvo por una década en el poder, también desterró a obispos y atacó a sacerdotes.
“No hay justificación para detener y enjuiciar a los sacerdotes solamente por el hecho de predicar la Palabra de Dios, eso nunca ha sido delito en ninguna parte del mundo, menos en Nicaragua”, agrega el dirigente opositor.
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“Aquí en Nicaragua, hubo casos en los años de 1980 con el Monseñor Antonio Vega, Obispo de Chontales, que lo desterraron y ahora vemos que han venido con mayor saña contra los sacerdotes”, observa el dirigente político.
Recientemente, un informe de la abogada nicaragüense Martha Patricia Molina, ubicó en 529 los ataques contra la Iglesia Católica desde el año 2018, cuando estallaron las protestas en contra del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
