En el marco del Día Mundial de la seguridad de los pacientes, se pone de manifiesto la importancia de garantizar una atención médica segura y de calidad para prevenir daños y salvar vidas.
En Nicaragua, sin embargo, aún son muchas las personas que sufren las consecuencias de diagnósticos incorrectos y la falta de protocolos adecuados en los centros de salud, hospitales o clínicas privadas.
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ToggleUna negligencia en la vida de Ana
Ana Solis, es una mujer nacida de Boaco, pero reside desde hace varios años en Managua, recién acaba de cumplir 50 años. Relata a Intertextual su dolorosa experiencia en un hospital público, donde un diagnóstico tardío y la falta de atención adecuada marcaron su vida para siempre.
“Yo llevaba semana con dolores intensos en el abdomen, no encontraba paz de ninguna manera, me daba fiebre y muchos malestares. Fuí varias veces al hospital, pero los doctores no me atendían mis síntomas. Me recetaron calmantes y me enviaban a casa sin hacerme pruebas” recuerda en un tono de tristeza mezclada con molestía.
La negligencia llegó a su punto más crítico, a la semana. Ana colapsó en su hogar de tanto dolor. Su familia la llevó nuevamente de emergencia y los médicos por fin descubrieron que había desarrollado “una peritonitis grave” debido a una “apendicitis no diagnosticada a tiempo».
“ Ya era tarde. La infección se había expandido por todo mi abdomen, me parece mentira lo que viví y que estoy contando el cuento.”
La ciudadana tuvo que pasar por varias cirugías sigue contando “ si me hubieran escuchado antes, mi salud no estaría tan deteriorada” resiente.
Secuelas de un mal diagnóstico
Con el paso del tiempo Ana dice verse superficialmente bien atendiendo sus quehaceres del día, pero es una persona que sufre secuelas permanentes causadas por el mal diagnóstico de salud.
“Tras la serie de cirugías que me realizaron, quedé con complicaciones crónicas que me impiden trabajar como antes y llevar mi vida normal,” dice y añade “ mi vida cambió por completo. Perdí mi empleo, y mi salud sigue tambaleando. Todo hubiese sido diferente si me hubieran visto a tiempo” dice apesarada.
La situación de Ana es un ejemplo de los desafíos que enfrenta Nicaragua en materia de seguridad de los pacientes. La falta de inversión en salud, lo errores en los diagnósticos y la deficiente atención hospitalaria son problemas que afectan gravemente a la población, sobre todo en los sectores más vulnerables.
Llamado de la OPS para mejorar la seguridad de los pacientes
En el contexto del lema de 2024, “ Diagnóstico correctos, pacientes seguros”, promovido por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en el Día de la Seguridad de los Pacientes, se enfatiza en “ la importancia crucial de lograr diagnósticos precisos y oportunos para salvaguardar la salud y el bienestar de las personas en todas partes” dijo el doctor Jasbas Barbosa director de la OPS.
La OPS pide a todas las partes interesadas que “adopten las medidas necesarias para priorizar la seguridad del diagnóstico y adoptar un enfoque multidimensional que refuerce los sistemas, que permita seguir vías de diagnóstico seguras, ayude a los trabajadores de la salud a tomar decisiones correctas e implique a los pacientes a lo largo de todo el proceso de diagnóstico, favoreciendo la reducción de los errores diagnósticos, que a menudo surgen de una combinación de factores cognitivos y del sistema que afectan el reconocimiento de los signos y síntomas clave de los pacientes, y la interpretación y comunicación de sus resultados de estudios y pruebas.”
Según datos de la Organización anualmente “143 millones de personas en el mundo sufren daños, como consecuencia de la falta de seguridad en la atención hospitalaria.” La mayoría de estos casos se producen en países de ingresos bajos.Los datos revelan que en el mundo ocurren “ 2.6 millones de muertes anuales”, además que la falta de seguridad de los pacientes causa un gasto hospitalario del 15% del presupuesto.
Barbosa concluye haciendo un llamado a los Estados en el mundo. “ Hago un llamado a todo los líderes tomadores de decisiones responsables de políticas de salud a que prioricen la seguridad diagnóstica como un pilar fundamental en las mejoras en los sistemas de salud, solo a través de un compromiso decidido y sostenido podremos dar los mejores diagnósticos y proporcionar un atención de la salud más segura para todas las personas.”